Desde un templo en las montañas de Wudang, China, la cuna de las artes marciales taoístas o daoístas, Leonel Pedraza nos comparte sus experiencias de aprendizaje y entrenamiento de una disciplina milenaria, con uno de los grandes maestros de esa mística región.
El Sendero del Discípulo en China… Un día de entrenamiento (1ª parte)
Por Leonel Pedraza
Colaborador especial desde un templo en China
Wudang, China, sept., 2014.- En Wudang, el entrenamiento varía un poco en cuanto al enfoque de las personas que están aquí. Algunas vienen sin saber absolutamente nada de kung fu y su interés está principalmente en mejorar su salud o tratar algún problema específico como reumatismo, artritis, presión alta, incluso, me ha tocado durante este tiempo convivir con personas que vienen con problemas psicológicos y su enfoque está dirigido hacia la meditación y el Qigong.
En mi caso, deseo alcanzar un entrenamiento holístico. Mi interés es convertirme en un verdadero Shifu, y por eso necesito aprender y practicar desde los pateos y movimientos básicos, hasta los ejercicios más complicados con armas y, por supuesto, la meditación y el Qigong.
El Kung fu interno de Wudang se enfoca en la suavidad, por lo que muchos de los ejercicios que practicamos están diseñados para hacernos más sensibles, y con ello, poder redirigir las fuerzas del oponente con el uso mínimo de nuestra energía.
Otra de las técnicas mas importantes del kung fu de Wudang es la práctica donde el objetivo es que a través de la relajación muscular logremos generar la mayor velocidad en nuestros golpes, esto se conoce como FALI (发力)) -que puede ser traducido como “Disparo de energía” y cuando es aplicado correctamente el resultado es realmente poderoso-.
Estas son dos de los principios fundamentales del kung fu de Wudang; sin embargo, existen un sinfín de prácticas y técnicas más específicas que aquí no alcanzaría a nombrar.
Nuestro día comienza a las 4:50 am, un primer silbato indica que tenemos 10 minutos para estar vestidos y formados en el patio de entrenamiento. A las 5 am comienza la clase, los niños corren,entrenan pateos y ejercicios básicos, en tanto que los adultos practicamos ya sea meditación o Qigong, aunque podemos unirnos al entrenamiento de los niños si así lo queremos.
Acabada esta hora nos dan el desayuno; usualmente consiste ya sea en arroz frito con verduras o noodles con verduras. Para la mayoría de los extranjeros, esto es muy diferente a lo que usualmente acostumbramos en occidente, y por lo mismo, tardan un tiempo en acostumbrarse.
Después de esto, los niños se preparan y parten a su clases en la escuela del pueblo y solo los adultos nos quedamos aquí, hasta que a las 7:30 am se el siguiente silbato con el que indica que la clase está comenzando y ya debemos de estar ahí, de lo contrario, podemos recibir un castigo, que pueden ser desde 20 lagartijas o mantener la posición de caballo (mabu) -básica en kung fu-, hasta que nuestras piernas se doblen y repetirlo toda la hora.
En esta clase comenzamos con una carrera de 15 minutos, para continuar con ejercicios de saltos y velocidad, por otros 15 a 20 minutos; después de esto, pasamos a practicar la elasticidad, seguido de pateos y “Jiben Gong”, o movimientos básicos, durante una hora.
Al terminar, tenemos media hora de descanso para beber agua y comer alguna fruta, tras lo cual, comienza la tercer clase del día, que es de 9:30 a 10:30 de la mañana. En esta sesión cada quien practica sus ejercicios individuales, ya sean Taolu (formas), o más ejercicios de Qigong. En esta clase, los instructores y nuestro Shifu nos revisan uno por uno, y así, corrigen errores o enseñan nuevos pasos de las formas.
A partir de las 10:30 horas, comienza el descanso más largo del día; mediahora después, nos dan la comida que consiste en arroz blanco, y de tres a cinco guisados diferentes. Al ser una escuela Daoísta comemos muy poca carne o de procedencia animal al día, uno de estos platillos suele ser carne o huevo y los demás son diferentes guisos de verduras y tofu.
Hay quien creería que esto no es suficiente para la cantidad de ejercicio que hacemos, pero en verdad, es una dieta muy saludable y abundante, e incluso, muchas veces es demasiada comida, así que uno debe de tener cuidado en no pedir demasiado ya que no esta permitido desperdiciar la comida tirándola a la basura.
Este descanso dura hasta las 16:00 horas, momento en que el sol y calor del mediodía han bajado un poco, para dar paso a otra clase que dura una hora y en la que entrenamos ya sean ejercicios básicos de Baguazhang, un estilo de arte marcial interno, o una práctica del Taijiquan conocida como Tuishou, que consiste en una serie de ejercicios para entrenar la sensibilidad necesaria para aplicar las técnicas del Taijiquan en un combate.
Continuará…
Fotos: Leonel Pedraza González. Síguelo en Facebook como Leonel Pedraza(Chong Yuan ), Wudang Longmen Kung fu México y Centro Wuji.