Después de una semana concentrados en las Villas Tlalpan, las y los atletas de la Selección Mexicana de Kickboxing juvenil cerró su preparación para el Campeonato Mundial 2024 en Budapest.
Para este reto que se dará en agosto, el equipo nacional tuvo un promedio de entre ocho y nueve horas diarias de trabajo entre entrenamientos, talleres, pláticas informativas y sesiones de video cada jornada.
Tras agradecer a todos los involucrados por más de una semana de trabajo en una nueva generación de kickboxers, Fernando Granados León, presidente de la Federación Nacional de la especialidad (FENAKIB), destacó la evolución del Campamento de Evaluación y Desarrollo Deportivo.
“Estoy contento, más no satisfecho porque sé que podemos dar mucho más, este es el primer paso y el Campeonato Mundial ya empezó desde hace mucho, ahora solo es momento de ajustar detalles a unas semanas del torneo, de atender las indicaciones de los profesores y del equipo multidisciplinario”, afirmó Granados León.
En una jornada final en la que predominó la camaradería entre atletas y entrenadores, el presidente reiteró la invitación a todo el grupo a visualizar, con los ojos cerrados, todo lo que han pasado de manera individual y en familia para estar concentrados en las instalaciones de la CONADE.
“Hay que dar gracias, todo esto que estamos viviendo es un aprendizaje para ustedes y también para nosotros, gracias a Dios o a quien ustedes crean, hay que agradecer lo que tenemos y la salud, somos un equipo y todos juntos somos México”, agregó.
Después de los ocho días de trabajo conjunto apoyados por el equipo multidisciplinario, las y los seleccionados regresaron a sus estados de origen, donde prácticamente tendrán tiempo de ajustar o corregir aspectos técnicos o deportivos previo a su próxima cita antes de viajar a Hungría, tentativamente el 21 de agosto para el abanderamiento por parte de la CONADE y, al día siguiente, partirán a la competencia.
Con información y foto de la FENAKIB.