El judo mexicano se hizo presente en el podio de los XIX Juegos Panamericanos Santiago 2023, dentro de la segunda jornada de competencias en su disciplina, pues Prisca Awiti Alcaraz, categoría -63 kilogramos, logró medalla de bronce, al igual que Gilberto Cardoso Martínez, en los -73 kg; con estas dos preseas, nuestro país suma cinco: dos platas y tres bronces.
La gladiadora mexicana compartió a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), sus impresiones tras su combate contra la argentina Agustina de Lucía, a quien enfrentó para poder subir al podio.
“Estoy muy orgullosa, pero también triste porque siempre vengo con la mente en la medalla de oro. Es importante seguir en el podio, especialmente en mi categoría que es muy fuerte y a nivel de América es muy alto, así que estar en el podio es motivo de orgullo”, comentó.
A pesar de haber disputado repechaje previamente, destacó cuáles fueron las claves para no caer en la lucha por el tercer lugar. “Cuando perdí en los cuartos de final, mantuve mi mente enfocada en que todavía teníamos medalla de bronce y ahorita, ya puedo relajar y reflexionar sobre los combates que perdí y gané, mejorar para siguientes competencias”, dijo.
“Siempre estamos haciendo análisis técnicos porque el judo siempre está cambiando. Ningún combate es el mismo y aunque le he ganado a personas muchas veces antes, hoy es ejemplo de que no es igual; queda hacer un estudio técnico”, añadió.
Gilberto Cardoso Martínez, también habló para CONADE, y expresó lo importante y elevado que es el nivel de su división, lo que da mérito a estar entre los tres mejores del continente americano.
“Mi categoría es durísima, de la de los hombres es de las más fuertes, todos los atletas en la lista son grandes rivales; lo considero como una sorpresa porque no sabes quién va a ganar, pues todos son fuertes y triunfa el que esté mejor física y mentalmente; quien utilice lo que tiene a favor a la hora de competir puede encontrar la victoria”, señaló.
Además, resaltó el equilibrio que juega en el judo la mente y el trabajo físico. “Esto es de mucha fuerza mental, pues llegan pensamientos invasivos como ya ríndete, déjalo aquí´ y no, uno tiene que ignorarlos y ver que puedo cambiar”, puntualizó.
Con información y foto de CONADE.
