El Pencak Silat, arte marcial de Indonesia, fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Organización Mundial de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés).
La declaratoria fue realizada en días pasados, durante la reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, realizado en Bogotá, Colombia, entre el 9 y el 14 de diciembre del 2019.
A través de la página en internet UNESCO – Patrimonio Cultural Inmaterial, el organismo internacional menciona que además de su dimensión deportiva, el arte marcial tradicional denominado “pencak–silat” engloba aspectos relacionados con el ámbito mental y espiritual, la práctica de la autodefensa y el arte.
Asimismo, indica que los movimientos y estilos del “pencak–silat” influyen muy considerablemente diversos elementos artísticos basados en la unidad del cuerpo y de su movimiento adaptado al acompañamiento musical.
El término “pencak”, usado sobre todo en Java, y el vocablo “silat”, más extendido en Sumatra Occidental, designan un conjunto de artes marciales muy similares. Además de sus denominaciones específicas, cada región posee sus propios movimientos, estilos, acompañamientos, músicas y equipos (vestuario, instrumentos musicales y armas tradicionales).
Los practicantes de este elemento del patrimonio cultural inmaterial aprenden a mantener viva su relación con Dios, los seres humanos y la naturaleza, así como a dominar diferentes técnicas para afrontar ataques o situaciones peligrosas basándose en los siguientes principios: autodefenderse, proteger al prójimo, evitar herir al agresor y fomentar el espíritu de camaradería entre los adeptos al “pencak–silat”.
De igual manera, refiere que esta práctica sociocultural fortalece los vínculos de compañerismo, preserva el orden social y anima las ceremonias rituales.
Los conocimientos y competencias prácticas que guardan relación con este elemento se suelen adquirir en centros de enseñanza no formal, y comprenden el aprendizaje de expresiones y tradiciones orales conexas (saludos, frases filosóficas, poemas con rima, proverbios y canciones), así como la formación en técnicas para tocar instrumentos musicales.
Con información e imágenes tomadas de UNESCO – Patrimonio Cultural Inmaterial.