La chía es una de las semillas de origen mexicano que siguen sorprendiendo al mundo científico por sus grandes aportes nutrimentales, por lo que es considerada un superalimento que consumen atletas y practicantes de artes marciales de todos los niveles, y que además que es una alternativa en casos de hipertensión.
Se le considera un superalimento, porque es fuente excelente de fibra, vitaminas y minerales, además de contener alto contenido en fitonutrientes y compuestos antioxidantes como las vitaminas A y E y el betacaroteno; y de baja densidad calórica que reducen el riesgo de enfermedades cardíacas, entre otras.
Entre las diferentes maneras de consumo, esta semilla se combina en aguas frescas, licuados, ensaladas, postres, dulces tipo palanquetas, barras nutrimentales o directamente en pequeñas porciones.
En un trabajo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT), titulado “La chía y su función contra la hipertensión“, la semilla Salvia hispanica L. contiene fibra, antioxidantes, calcio y proteínas, además de ser una de las fuentes vegetales más rica en ácido graso omega 3.
Aunque su popularidad se dimensiona e tiempos recientes, esta semilla ha sido por siglos un alimento básico en las culturas mesoamericanas, pues los mayas y los aztecas la utilizaban para preparar medicinas.
Su uso en la actualidad se da en diversas presentaciones, gracias a su versatilidad de consumo, pudiendo añadirse al agua, frutas y ensaladas, así como en la preparación de batidos y panadería, o bien una ingesta directa.
Sin efectos secundarios
Las propiedades de la chía no son solo un complemento para una dieta saludable, ya que sirve de igual forma como un insumo de prevención y tratamiento contra la hipertensión, sin los efectos secundarios de los medicamentos clínicos.
De acuerdo al CONACYT, el doctor en ciencias biológicas e investigador de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), Jesús Vázquez Rodríguez, ha realizado estudios sobre los extractos de la chía contra la hipertensión.
“Hemos obtenido resultados muy positivos en los extractos de polifenoles, con efectos muy similares a los que produce el captopril, que es el medicamento que actúa contra la hipertensión”.
Una investigación realizada en la misma UANL demuestra que estos efectos se dan gracias a su composición, donde los hidratos de carbono engloban entre 35 y 40 por ciento de su peso final, pero en ellos no se encuentran azúcares, ni monosacáridos ni disacáridos.
Una de las ventajas de la chía, por sobre el captopril, radica en los resultados sin deterioros posteriores en su consumo, asegura el doctor Jesús Vázquez.
“El captopril es uno de los medicamentos más recomendados por los médicos, pero cuenta con ciertos efectos secundarios, como tos crónica, proceso de inflamación, dolor de cabeza, mientras que en la chía no se encuentra eso”.
Si bien los antioxidantes resultan fundamentales en el combate a la hipertensión, estos son solo uno de los aportes proporcionados por la Salvia hispanica, puesto que su composición integral la convierte en un alimento funcional.
“La chía entera ayuda a un buen funcionamiento del cuerpo, mejorando la digestión y el sistema circulatorio, favoreciendo la movilidad de lípidos. Puede contribuir a disminuir el peso y la grasa corporal, porque contiene grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, lo que se conoce como ‘grasa buena’”.
La chía como ingesta para reducir la grasa corporal
Aunque en Internet circulan múltiples métodos para bajar de peso y, a la par, combatir la hipertensión, que resultan ser falsos, la Revista Mexicana de Ciencias Agrícolas publicó en su edición septiembre-noviembre de 2017 un artículo titulado “Chía (Salvia hispanica) situación actual y tendencias futuras”, donde muestran la relación entre el consumo de chía y la pérdida de peso.
En el estudio se comprobó que una suplementación de 35 gramos de harina de chía en la dieta de humanos por 12 semanas logró reducir significativamente el peso y la circunferencia, gracias a su alto contenido de omega 3 que suprime el apetito, optimizando la oxidación en los lípidos y el consumo de energía.
Además, dicha publicación establece que el omega 3 ayuda al control de la glucosa después de ingerir alimentos, situación que favorece la presión y coagulación de la sangre.
El omega 3 es uno de los ácidos grasos esenciales, encontrados principalmente en el pescado, pero la chía puede actuar como sustituto de esta ingesta.
“Normalmente la suplementación del omega 3 se obtiene por medio de agentes del pescado, algo que la semilla de la que hablamos contiene en grandes cantidades. Esto se acentúa en la actualidad con el boom vegano, pues quienes siguen este tipo de régimen pueden obtener el omega 3 vía la chía”.
Con información e imagen de Agencia Informativa Conacyt.