Mamás solteras o casadas, siempre están al lado de sus hijas e hijos, y desde siglos atrás, han sido las encargadas de velar y defender su hogar, a veces olvidándose de ellas mismas, para que sacar a su familia adelante, por lo que son la imagen viva de una guerrera.
No por nada, estas cualidades y entrega hacen que varias doctrinas espirituales consideren a la madre como la manifestación del Amor Divino aquí en la tierra, necesario para el equilibrio universal.
El rol de la Madre moderna no es el mismo de apenas unas décadas: dedicada al hogar y la educación de los hijos. Hoy en día, ellas son base de la economía del hogar y desempeñan papeles importantes en la fuerza productiva en todas las áreas de cada país.
En las artes marciales, en la mayoría de los casos, ellas son quienes se encargan de llevar a sus hijos a sus clases y torneos, además de que los impulsan a continuar su aprendizaje, así como llevar todas actividades cotidianas.
En su faceta de estrategas, es admirable ver cómo una mamá organiza las actividades del día en su trabajo, cualquiera que éste sea, y hay algunas que aún con ese ajetreo, tienen tiempo de practicar algún Arte Marcial ya sea como practicante o maestra, donde llegan a cuidar a sus alumnos como sus madres.
No hay Arte Marcial o deporte de contacto en el que no hayan incursionado muchas madres de familia, quienes también participan en competencias y donde llegan a ser las mejores exponentes en eventos de cualquier nivel.
En México han surgido grandes campeonas-mamás en disciplinas tan diversas como Taekwondo, Judo, Jiu Jitsu, Karate Do, Aikido, Wushu, Box, Lucha Libre, y muchas más donde siempre han demostrado gran calidad y fortaleza.
Y en contra de la idea de la antigüedad, cuando se pensaba que las artes guerreras eran solamente “cosas de hombres”, se sabe que mientras que el varón era quien se ocupaba de ir a un campo de batalla para la defensa o conquista de un territorio, la mujer y madre de familia era la encargada de proteger el hogar y defender a su familia, por lo que realmente la mujer asumía su papel de guerrera de la familia.
En esta idea, no deben olvidarse aquellas quienes se convirtieron en grandes maestras y cuyas leyendas se encuentran por todo el mundo como el caso de la fundadora de uno de los estilos de Wing Chun, la monja Ng Mui, quien enseñó las técnicas de Shaolin a Yim Wing Chun y que gracias a la técnica pudo derrotar a los hombres que las acosaban, surgiendo así el Wing Chun, arte reconocido a nivel mundial, efectivo en la defensa personal y practicado, entre otros, por Ip Man y el legendario Bruce Lee.
Además de ella, está la legendaria Hua Mulan, quien, aunque no fue madre, demostró la determinación y valor de una mujer para defender a su familia, al vestirse de hombre para ir a la guerra en la antigua China.
Qué decir las mujeres Ninjas, las guerreras Kunoichi, del Japón antiguo, quienes eran madres encargadas de enseñar a sus hijos las artes ninja, así como las protectoras de sus clanes.
Además de ellas, estuvieron las Onna-Bugeisha o mujer samurái, quienes fueron esposas, hijas o hermanas de un samurai, y quienes utilizaban la naginata como su arma principal, además de estar entrenadas en el uso de armas para proteger su hogar, familia y honor en tiempos de guerra, e incluso, salieron al campo de batalla en el antiguo Japón, tal como fue el caso de la emperatriz Jingu, Tomoe Gozen y Nakano Takeko, quienes son un ejemplo de estas exponentes.
En Okinawa, cuna del Karate, surgieron grandes mujeres karatekas, como la esposa del Maestro Gichin Funakoshi, quien entrenaba con él; en el Judo, se cuenta con grandes Maestras como Keiko Fukuda, alumna directa del fundador Jigoro Kano.
Asimismo, se encuentran las leyendas de las guerras griegas conocidas como Amazonas, mencionadas en el libro de La Ilíada como Antianiras ─las que luchan como varones─ y por Herodoto como Andróctonas ─asesinas de varones─.
También los celtas tuvieron sus guerreras como Scathach o Scatagh, a quien se le atribuye haber sido la maestra de príncipes celtas irlandeses; entre los vikingos, además de tenerlas en su mitología, las estuvieron en carne y hueso como las Valquirias, donde una de las más famosas fue Sváva o Sváfa.
Y en lo que se refiere a nuestros antepasados, aquella mujer que además de ser la encargada de educar a sus hijos para los roles correspondientes como varones o mujer, era responsable de cuidar el hogar mientras los hombres iban a la guerra, y en caso de morir en el parto, recibía reconocimiento y honores como todo guerrero muerto en batalla.
Es por ello que el Día de las Madres es tan especial. Se les rinde reconocimiento y admiración a todas ellas, ya que, sin descuidar todas las labores inherentes a su maternidad, practican algún Arte Marcial y son unas Guerreras que defienden a sus hijos, su hogar y su familia.
Por todo esto, y por todo el amor que nos da una madre, gracias, respeto y felicidades…
Imagen: Archivo Sendero Artes Marciales, Wikipedia, Aki Monogatari y Early Bird Books
Y en nuestros antepasados, aquella mujer que moría en el parto tenia el honor como los hombres muertos en batalla de ir al Tlalocan, un lugar entre los volcanes….